En la Casa Madre Antonia, las Hermanas Oblatas del Santísimo Redentor ofrecen un espacio seguro para que más de 450 mujeres en situación de prostitución pueden construir un futuro diferente. A través de talleres de capacitación, terapias psicológicas y curativas, y formación espiritual, las religiosas ayudan a las mujeres a valorarse y a conocer sus derechos. Antes que juzgarlas, como en el pasado, las hermanas ahora las acompañan, educan y empoderan. A través de este reportaje podrás conocer cómo ha venido cambiando la vida de estas mujeres de la Merced, el mayor distrito de prostitución de Ciudad de México.