"La parusía o segunda venida no significa solamente la venida definitiva del Señor. Él viene, ha venido, se ha quedado con nosotros. En realidad, somos nosotros los que vamos caminando hacia Él. Comencemos la preparación al Adviento orando insistentemente para que sepamos reconocer su venida o, mejor, su presencia entre nosotros. Vislumbremos la liberación", comenta la teóloga Consuelo Vélez en su reflexión al Evangelio del primer domingo de Adviento para la serie Al partir el pan.